El conjunto de enfoques, planes e investigaciones destinados a aumentar la comercialización de un producto es como los expertos definen el marketing. Pero, en general, este se refiere a todo lo que le facilita vender más y mejor los bienes o servicios. Esto se logra bien sea mediante la homogeneización del personal, la investigación sobre el precio objetivo de sus productos o por las campañas publicitarias de televisión en horario de máxima audiencia.
Las divisiones de marketing y ventas de las grandes organizaciones son muy hábiles en la gestión de toda esta información. Pero, ¿qué pasa con la mayoría de las empresas, pymes, micropymes y contratistas independientes?
En España, las pequeñas empresas y los profesionales independientes o autónomos constituyen la inmensa mayoría de las empresas y a menudo carecen de una comprensión clara de qué es o para qué sirve el marketing. Se presentan, entonces, los problemas de marketing que dificultan el crecimiento y rendimiento de las organizaciones.
Errores de marketing más comunes
Antes que nada, hay que aclarar que para no cometer los errores que se enumeran a continuación, las empresas pueden recurrir a compañías especializadas en marketing y todo tipo de campañas. Tal es el caso de Mailrelay, cuyo equipo multidisciplinario puede encargarse de manejar o crear planes de publicidad para todo tipo de necesidades.
No saber dar a conocer el producto
El mejor vendedor de un producto no siempre es la persona que más lo conoce. El dueño de una compañía puede conocer las características del producto, los procesos de producción y los materiales, pero no sabe cómo venderlo a un cliente potencial que solo está interesado en una característica de los cientos que ofrece el artículo.
Todo producto o servicio debe describirse desde la perspectiva del cliente:
- Qué espera el cliente de ese servicio o producto
- Precio, calidad, fiabilidad y capacidad para resolver problemas
- Mayor comodidad, etc.
Encontrar un segmento en el mercado
Los empresarios de hoy en día cometen con demasiada frecuencia el error de poner en marcha su empresa y creer que todas las personas son clientes potenciales.
Y más aún si el empresario está mínimamente familiarizado con las redes sociales o simplemente tiene un gran número de amigos en Facebook. Todos intentan vender algo a alguien.
Establecer de antemano la categoría de mercado objetivo y el cliente ideal es esencial. La primera ventaja es que da una idea muy precisa del potencial del negocio. El segundo punto es que se debe ser consciente de lo que el público objetivo busca en los productos o servicios.
Es posible que elijan sus productos en función de la novedad (sobre todo en el caso de los productos tecnológicos), el precio, la calidad o el estatus que conlleva su posesión.
Saber lo que el consumidor ideal quiere de tu empresa o producto ayuda a explicar mejor la oferta, lo que se traducirá en un aumento de ventas y beneficios.
No tener comerciales o promoción
Una de las vocaciones con mayor demanda es la de vendedor. Un vendedor fuerte puede ayudar a que una empresa avance durante las crisis económicas. Basta pensar en lo que son capaces de hacer en tiempos de prosperidad.
El problema es que se da por sentado que la única persona que debe vender y entender cómo hacerlo es el vendedor. Se debe organizar la pequeña o mediana empresa de forma que cada empleado sea un vendedor y sea experto en la promoción de su producto. Ese puede ser el secreto del éxito. Y solo un pequeño número de empresas dan prioridad a esto.
Hay que dejar que los vendedores hagan su trabajo. Si uno de ellos destaca por sus logros, debe elogiarse, cuidarse y mimarse, recalcando sus virtudes para que los demás tomen su ejemplo.
Un vendedor de éxito sabe lo que tiene que vender (lo que su empresa le ha encargado que venda en ese momento concreto), cómo vender, cómo fidelizar a los clientes y cómo generar ventas cruzadas (aumentar la facturación por cliente y los beneficios).
Negocios invisibles
Una de las principales responsabilidades del empresario es la comercialización de su empresa. El problema surge al seleccionar los medios y los recursos. Es muy fácil y barato hacer publicidad de un negocio.
Sin embargo, si se elige el medio equivocado y se centra en personas que no están interesadas en el bien o servicio, el tiempo y dinero se malgastarán.
Los comunicados de prensa, los anuncios de radio y televisión (locales, regionales, nacionales e internacionales), así como los anuncios en diversas plataformas de Internet, son algunos de los canales en los que puede anunciar tu empresa.
Folletos en los parabrisas de los coches, en los buzones de las casas y en las manos de las personas que pasan por delante de tu negocio. Realmente todo es válido en este sentido.
Crear un blog corporativo, posicionarlo para su sector y destacar las ventajas del negocio y la variedad de formas en que puede facilitar la vida de sus potenciales consumidores.
Páginas y cuentas en las redes sociales. Además, dado que las últimas modificaciones del algoritmo no permiten llegar a un gran número de personas, puedes realizar publicidad de pago en dichas redes sociales, bajo la asesoría y experiencia de agencias de marketing especializadas en esta labor.
Planificar eventos benéficos para las comunidades aledañas y asegurar que los medios de comunicación cubran las mismas.
Incluso los mensajes de WhatsApp pueden ser un gran método para promocionar la marca, y esto es especialmente cierto ahora que “WhatsApp Business” se presta como herramienta.
Carecer de planes de marketing
Todas las empresas, por grandes o pequeñas que sean, tienen un horario establecido, un periodo de vacaciones y saben cuándo pagar los impuestos y comprar la mercancía.
Sin embargo, muy pocas pequeñas y medianas empresas tienen una estrategia de marketing para elegir qué bienes o servicios promover para impulsar las ventas y cuándo hacerlo.
El plan de marketing tiene más éxito y es más eficaz cuando se sabe cuándo hay que vender ciertas cosas y cuándo hay que vender otras.
A partir de enero y hasta mediados de mayo, los gimnasios están a tope. Será fundamental que este se anuncie un poco antes para llamar la atención de todos los que buscan información. Planificar y actuar en el momento adecuado. Este es tan solo un ejemplo de todo lo que se puede hacer en marketing para impulsar el éxito de una empresa, marca o negocio.