La caída del cabello es una de las preocupaciones de salud más extendidas que existen. Sin un tratamiento que lo prevenga, y con muchas causas que pueden incidir en el desencadenamiento de sus síntomas -desde condiciones hereditarias hasta someterse a estrés o efectos secundarios de medicamentos e intervenciones quirúrgicas-, el implante capilar Turquia se ha convertido en uno de los procedimientos estéticos y clínicos más demandados. ¿Por qué conviene realizarse este tratamiento en un centro clínico en Turquía antes que en el país de origen? Muchas son las razones que justifican la decisión de miles de personas, que año tras año, se dan cita en ciudades como Estambul.
El precio
La principal razón por la que las personas viajan hasta Turquía para realizarse tratamientos estéticos como el injerto capilar está en las finanzas. Y es que, si bien es cierto que Turquía forma parte del continente europeo, su nivel económico y de vida se encuentra por debajo de la media de los países del mismo.
Por esa razón, realizarse un tratamiento estético o clínico en Turquía resultará siempre mucho más barato que realizarlo en el país de origen, lo que desencadenará, además, en otras ventajas:
- Turismo de salud: las diferencias de precio pueden ser tales que viajar a Turquía, alojarse en un hotel de lujo y pasear un fin de semana entero por la capital del país -considerando además los costes propios del tratamiento de implante capilar- puede representar sólo una fracción del coste de la sola intervención quirúrgica en el país de origen. Por esa razón, según las estadísticas del país, decenas de miles de personas viajan anualmente a Turquía en busca de mejores ofertas para un tratamiento, que por la estigmatización social que tiene, representa una preocupación muy alta para las personas que lo sufren.
- Competitividad: sólo en la capital existen más de 250 clínicas especializadas en los tratamientos más innovadores para combatir la caída del cabello mediante el injerto capilar. Esto no sólo favorece a una tendencia creciente, sino que incrementa la calidad de los servicios, a la vez que disminuye los precios -como una forma propia de generar competitividad-, lo que ha favorecido en gran medida a los clientes.
Innovación tecnológica y un servicio completo
A pesar de lo anterior mencionado, no sólo es el precio, la razón por la que muchas personas viajan a Turquía en busca de una solución para la calvicie, la caída del cabello o alopecia. A día de hoy, Turquía es uno de los países con mayor capacidad técnica, profesional y con mayor innovación tecnológica en lo que a los servicios de implante de cabello se refiere, y esa es otra de las razones por las que mucha gente decidirá hacer el viaje.
- Técnicas de última generación: aunque la técnica FUE es la más habitual y económica -consistiendo en la extracción e implantación de cabello del propio paciente-, con el tiempo se han desarrollado técnicas muy innovadoras, más seguras, pero con una mejor efectividad y con menores efectos secundarios o necesidades especiales por parte del paciente. En la actualidad, la mayoría de las clínicas turcas trabajan con el método FUE con hojas de zafiro, o con la técnica DHI, además de la tradicional técnica FUE, siendo una de las pocas regiones donde el usuario podrá escoger y, sin embargo, ahorrar en gran medida.
Un servicio completo: además del tratamiento específico para el problema de caída del cabello o calvicie, los servicios de las clínicas en Turquía ofrecen otras posibilidades que son elegidas por los usuarios, como puede ser la garantía por muchos años, alojamiento en hoteles de lujo, traslados, revisiones gratuitas, productos para el cuidado posterior al implante y un servicio de traducción sin coste adicional, para que la barrera cultural nunca sea un problema.
