En los hogares de hoy en día no estamos para perder el tiempo con las alfombras.
Queremos alfombras prácticas, cómodas y fáciles de limpiar. Y si además son bonitas y naturales, mejor todavía.
¿Qué más les podemos pedir? ¿Que sean económicas? Pues acabas de describir con gran precisión la familia de alfombras de bambú.
Alfombra de bambú, la alfombra en la que no estás pensando
Hay tantos tipos de alfombras que a veces nos olvidamos de los más básicos (y lo decimos en el buen sentido de la palabra).
- Imagínate una alfombra natural, cálida y colorista.
- Imagínate que es lisa y plana, donde no se acumula el polvo.
- Imagínate que es muy fácil de limpiar, porque además del robot o el aspirador le puedes pasar, si hace falta, una fregona húmeda (intenta hacer eso con tu alfombra shaggy).
- Imagínate que es alegre, colorista y que tiene una gama amplia con acabados naturales, decapados, lisos y estampados.
- Imagínate además que sean tan económicas que el día (dentro de mucho tiempo) que tengas que cambiarlas apenas te dolerá.
Pues ya tienes una radiografía de lo que las alfombras de bambú pueden hacer por ti y por tu decoración.
¿Cómo son las alfombras de bambú?
Son alfombras de estilo ecléctico fabricadas con madera de bambú, cortada habitualmente en láminas finas de un centímetro y medio de ancho.
En ocasiones las varillas de bambú son más finas y se acompañan de un trenzado de hilo.
La base es de fieltro con aplicaciones de goma (precaución importante para que alfombra no se mueva del sitio y no se tropiece con ella) y va pegada a las láminas formando un cuerpo fino, que apenas levanta del suelo unos 5 mm.
El remate puede ser con cinta o directamente al corte, creando alfombras con una gran limpieza visual.
Una de sus características principales es la de ofrecer gran variedad de acabados distintos.
Empezando por la gama de colores, que ofrece desde tonos de madera natural hasta colores vivos y brillantes. Además de acabados decapados, con efecto ‘lavado’ o envejecido.
También encontramos alfombras de bambú estampado con motivos de inspiración étnica para llevar la decoración a un nivel superior.
Olvídate del polvo y las alergias
A diferencia de las alfombras con pelo, que les encanta acumular polvo y suciedad
hasta en el último recoveco, las alfombras de bambú no tienen nada que esconder.
Su superficie lisa impide la acumulación de suciedad, lo cual agradecerán las personas con propensión a las alergias.
Buenas para mascotas
Ya sabemos que hay mascotas y mascotas y que a algunas no hay mueble o alfombra que les resista.
Pero salvo que tu mascota sea un cocodrilo del Nilo, lo más probable es que haga buenas migas con tu alfombra de bambú.
La alfombra ecléctica para todo uso
Las alfombras de bambú ofrecen un equilibrio entre decoración, calidez y economía como muy pocas alfombras en el mercado pueden ofrecer.
Para el salón, para el dormitorio o para el pasillo.