La discapacidad visual puede ser una experiencia desafiante para muchas personas, ya que impide una cosa tan básica como la visión. Para aquellos que han perdido su capacidad de ver completamente, ha sido un viaje largo y agonizante de aceptar su nueva realidad. Pero, gracias a los avances en la tecnología médica, las personas con discapacidad visual tienen una nueva opción de tratamiento llamada Implantes de Retina.
¿Qué son los Implantes de Retina?
Los Implantes de Retina son un tipo de dispositivo electrónico que se coloca en el ojo para restaurar la visión en personas ciegas o con discapacidad visual. Estos dispositivos funcionan implantando un conjunto de electrodos en la retina que estimulan las células de su visión que aún quedan. Los Implantes de Retina se pueden utilizar en personas con cualquier tipo de discapacidad visual, incluyendo la retinitis pigmentosa, la degeneración macular y otros trastornos de la retina.
¿Cómo funcionan los Implantes de Retina?
Hay dos tipos de Implantes de Retina: el extraocular y el intracular. El extraocular utiliza una cámara montada en un par de gafas para capturar imágenes y transmitirlas a un sistema de electrodos que están colocados en la retina. El intracular, por otro lado, se coloca directamente en la retina del ojo.
Una vez que se coloca el implante en la retina, los electrodos comenzarán a enviar señales eléctricas a las células restantes de la retina, lo que les permitirá enviar información al cerebro. Esencialmente, los Implantes toman el lugar de las células de la retina dañadas. Aunque no suelen ofrecer una visión perfecta, permiten al paciente ver figuras, formas y contornos.
¿Quién es candidato para los Implantes de Retina?
No todos los pacientes con discapacidad visual son adecuados para los Implantes de Retina. Un oftalmólogo calificado deberá evaluar cada caso individualmente para determinar la elegibilidad. En general, los candidatos deben tener una enfermedad de la retina en etapa avanzada y tener algún grado de células de la retina funcional. Los Implantes de Retina se han utilizado con éxito en pacientes entre las edades de 25 a 75 años.
¿Cómo es el proceso de colocación del Implante de Retina?
El proceso para un Implante de Retina generalmente implica dos cirugías en un periodo de varios meses. En la primera cirugía, se coloca el dispositivo en el ojo del paciente. En la segunda cirugía, se coloca el dispositivo externo.
Una vez que los Implantes están en su lugar, el paciente tendrá una sesión de rehabilitación para aprender a utilizar el dispositivo y a interpretar las señales visuales que recibe. En algunos casos, los pacientes han logrado utilizar los Implantes de Retina con éxito para realizar tareas cotidianas, como leer y reconocer caras.
En conclusión, los Implantes de Retina son una opción emocionante y potencialmente transformadora para aquellos que padecen discapacidad visual. Los Implantes restauran la visión en pacientes que han perdido su capacidad de ver completamente debido a enfermedades de la retina en etapa avanzada. Si cree que podría ser un candidato para este procedimiento, póngase en contacto con su oftalmólogo para saber más. Aunque no es una cura para la discapacidad visual, los Implantes de Retina pueden ser el primer paso para una vida más independiente y plena.