Sufrir un accidente de tránsito mientras se conduce puede generar todo tipo de complicaciones, pero estas se pueden multiplicar en el caso de dar positivo en consumo de sustancias alcohólicas o alguna droga. No beber o consumir sustancias psicotrópicas es una recomendación que se debe saber, pero que muchos ignoran.
Ser atrapados en esta práctica es un delito, sobre todo en el caso de un accidente con positivo en alcoholemia que genere lesionados o daños materiales. Incurrir en esto puede derivar en multas elevadas, pérdida de la licencia de conducir y sanciones muy severas que incluyen estancia en prisión, por lo que en estos casos se requiere la asesoría y el apoyo de abogados especializados que guíen sobre los pasos a dar.
Posibles acciones legales
Existen dos situaciones en las que se requiere asesoría legal en accidentes de tráfico que involucran presencia de alcohol u otra sustancia: cuando el responsable de lo ocurrido es el conductor que ha dado positivo en la prueba de alcoholemia al superar los límites legales, o bien, cuando el causante es otra persona que ha dado positivo en el test de alcoholemia.
Los afectados por estos accidentes, en los cuales se ven involucradas las personas que hayan dado positivo por alcoholemia, pueden requerir apoyo. En JR Abogados son expertos en la atención de juicios y multas por alcoholemia, tanto en la defensa como para la demanda.
La ley de seguridad vial acarrea sanciones que pueden ir desde perder la licencia o ir a prisión. El juzgado asigna a un abogado de oficio tan pronto se inicia el proceso, y después no da oportunidad de cambiarlo, de ahí que lo mejor sea tener el apoyo de un especialista que domine la materia, desde el mismo momento en que ocurre el siniestro.
Actuar rápido
En JR abogados ofrecen la alternativa de recibir asesoría legal telefónica o por e-mail, de forma rápida, cómoda y segura, para saber qué hacer y evitar complicaciones. La respuesta telefónica se ofrece en un plazo de 15 minutos, para saber cómo afrontar la situación; y en el caso de la asesoría, por correo electrónico se puede obtener una evaluación del caso.
Las leyes en los últimos años se han vuelto más severas con los conductores ebrios, en vista del incremento del índice de muertes por accidentes viales en los que están involucradas personas que beben o consumen sustancias estupefacientes.
Conducir con una tasa de 0,60 mg/l de presencia de alcohol en aire espirado se considera delito al conducir, pero en el caso de estar involucrado en un accidente vial, al superar 0,40 mg/l en aire respirado es suficiente para ser imputado.
Alto coste a pagar
Todo adquiere más gravedad si quien ha dado positivo, además, es el causante del accidente. Si la persona en estado de ebriedad causa daños materiales por el accidente a otro vehículo, ya sea en viviendas, bienes públicos como semáforos, señales de tránsito o vallas, tendrá la responsabilidad de hacerse cargo de la reparación.
En el caso de resultar algunas personas lesionadas, las implicaciones son superiores; en estos podrá terminar en la cárcel o ser demandado por grandes cantidades de dinero. Las pólizas de seguro no protegen al conductor en caso de alcoholemia, por tanto, todo corre por cuenta del responsable.
En cada caso, la persona imputada recibe una citación para acudir a un tribunal en una fecha específica y, de poder pagarlo, debe ir con un abogado preferiblemente especialista en esta materia. Quienes reciben condena por ser responsables de daños a bienes o personas, por conducir ebrios o bajo los efectos de drogas, adquieren antecedentes penales.
Negarse a realizar la prueba ante las autoridades no es una opción viable, pues también se considera delito según la normativa española. La acción efectiva de un abogado permite afrontar estas situaciones de la manera menos traumática posible.