La Inteligencia Artificial (IA) ha sido catalogada como ni buena ni mala, funciona más bien como cualquier otra tipo de tecnología que se basa en su uso. Aunque como persona es importante encontrar el modo de como usarla y ponerla en práctica para avanzar más en sus funciones.
Aunque han surgido muchos debates en cuando: ¿cómo puede afectar la llegada de la inteligencia artificial a nuestra vida diaria? Y expertos lo explican cómo un impacto en diferentes medios y donde sea aplicado, como por ejemplo: (docencia, investigación, medicina y hasta en la literatura) y, una vez que su comienzo de buenos resultados, se puede decir que los chatbots como por ejemplo los ChatGPT de OpenAI serán un medio de conmoción en todos estos ámbitos.
En la rama de la investigación, se ha sacado un buen provecho de estas herramientas que nos facilita la IA, aunque a finales del 2020 se presentó una revolución parecida a la que se está viendo actualmente en otras áreas, esto fue visto cuando el software AlphaFold mostró que podía adivinar la estructura de una proteína manteniendo una exactitud fenomenal.
En vez de ser vistos como una pérdida para miles de expertos y el alejamiento de la biología estructural, una rama de estudio que ha llevado más de 100 años de historia, AlphaFold se integró a buenos protocolos como mejoramiento de estudios que aún deben realizarse de la forma tradicional, cosa que ha autorizado acelerar las investigaciones para el hallazgo de nuevos fármacos. En este medio de estudio, pues, la discusión sobre la amenaza de la Inteligencia Artificial parece que ya está superado.
En cambio, en la rama de la docencia, las destrezas que el ChatGPT domina para dar respuestas a preguntas que no necesitan de un análisis son encantadoras y esto ha dejado al manifiesto las debilidades del método educativo de hoy, frecuentemente fundamentado en la memorística y la selección acrítica de datos.
Beneficios en el campo educativo
La educación poco a poco ha ido tomando su espacio dejando buenos beneficios en la educación y los requisitos necesarios para avanzar. Pero, desde la primaria a la universidad, los institutos tendrían que arrumbarse a un viaje que activara la capacidad de conectarse, reflexionar y razonar, con el fin de integrar toda información apropiada para lograr una visión imaginativa que plantee nuevas soluciones y que llegue a nuevas interpretaciones, no un espacio donde únicamente se enseña a recopilar y devolver datos.
Hoy esto lo realiza un software y sin problemas, aunque hay que hacer énfasis en los cerebros para hacer lo que realizan mejor como: pensar. En cambio, en la rama de la medicina, la Inteligencia Artificial tiene la capacidad de dar diagnósticos a través de un listado de síntomas y estudios a través de equipos especializados.