En la actualidad existe un tratamiento del trastorno depresivo persistente bastante efectivo y que gracias a centros clínicos especializados. Se trata de la terapia cognitivo-conductual, una de las vertientes de la terapia psicológica más efectivas y con resultados demostrados..
Y es que el trastorno depresivo persistente podría denominarse como un trastorno depresivo habitual, pero que se caracteriza más que nada por ser persistente en el tiempo, o lo que es igual, que una persona con esta patología pudiera manifestar sensaciones de depresión durante incluso más de 2 años ininterrumpidos, siendo esa condición la principal dificultad para su diagnóstico efectivo -que las personas confunden su personalidad y su padecimiento por el tiempo en el que llevan “viviendo igual”-.
¿Cómo se origina el trastorno depresivo persistente?
Según las investigaciones clínicas y la experiencia de los centros especializados en psicología y psicoterapia, la aparición del trastorno depresivo persistente, también conocido como distimia, se debe a diversos factores que pueden manifestarse en solitario o en combinación con otros:
- Factores de personalidad: Algunas personas, debido a su personalidad, son más proclives a sufrir de problemas de depresión que, por supuesto, pueden transformarse en distimia. Las personas con mucha inestabilidad emocional -cambios bruscos hacia las emociones negativas- pueden sufrir de este tipo de problema.
- Factores de contexto: hay hechos ambientales o de contexto que influyen en la forma de ver la vida de las personas. La separación de los padres de un joven pueden hacer que sufra de trastorno depresivo persistente por el resto de su juventud y parte de su adultez; sufrir un robo, un accidente o ser expulsado de un lugar donde se sentía a gusto pueden ser condicionantes que deterioren tanto las emociones de las personas y les conviertan en pacientes con distimia.
- Factores de genética y fisiología: a nivel cerebral, hay algunas características hereditarias que influyen en las emociones, sobre todo en los desbalances de sustancias químicas en el cerebro, siendo la dopamina y la serotonina los más importantes. Cuando existen niveles más bajos de lo habitual de estos y otros químicos, las emociones tienden a ser muy bajas y negativas, favoreciendo los síntomas del trastorno depresivo persistente.
La importancia del tratamiento adecuado
Una persona con un cuadro depresivo no se diferencia en nada de una persona con un cuadro más grave, como el trastorno depresivo persistente, salvo en la duración de esos episodios negativos. No obstante, los psicólogos más capacitados sí tienen la facultad de diagnosticar con gran grado de éxito estos síntomas, tal como sucede en Psyclinic, un centro clínico y de psicólogos en Barcelona donde diariamente acuden muchas personas en busca de soluciones que pasen casi siempre por el tratamiento adecuado de psicoterapia para no tener -por no querer o por no ser posible- que acudir a las terapias farmacológicas.
La importancia de un tratamiento adecuado es que se podrán conseguir los resultados correctos, siendo también parte indispensable la realización de un diagnóstico acertado, ya que los síntomas del trastorno depresivo persistente -fatiga, baja autoestima, desesperanza, insomnio, desequilibrios alimenticios- se parecen mucho a los de otras enfermedades asociadas con los cuadros depresivos. La terapia cognitivo-conductual, en la actualidad, con o sin la compañía de la terapia farmacológica, es la mejor manera no solo de que las personas puedan superar esta enfermedad que no hace falta decir lo grave que es y las consecuencias que tiene para quienes lo padecen, sino que también resulta de utilidad en otros tantos síntomas y padecimientos psicológicos que afectan a las personas en su día a día.