El hormigón es un material muy noble, que se viene usando desde hace cientos de años en la construcción y en el diseño de infraestructuras. Su versatilidad y altas prestaciones lo han convertido en la solución favorita para todo tipo de proyectos de construcción, tanto para paredes, como para techos y suelos; en estos últimos, con una variedad de modalidades que los hacen más atractivos todavía.
El hormigón pulido, semipulido y el fratasado son algunas de esas alternativas que se pueden crear para los suelos y pavimentos de diversos espacios. Son la solución perfecta por la alta resistencia que tienen, su atractiva imagen y por lo bien que lucen y se adaptan a cualquier estilo de decoración.
La belleza del hormigón pulido
Los suelos y pavimentos de hormigón pulido son atractivos y muy elegantes. Su brillo, al que incluso se le puede dar efecto de espejo, es especialmente tratado para lograr la máxima brillantez.
Son perfectos para todo tipo de espacios, en el hogar, oficina o industria, a los que se les quiera dar un toque de sobriedad y elegancia, y donde a la vez, se necesite disponer de un suelo duradero y resistente, que no requiera complicados mantenimientos.
Se usa tanto para exteriores como para interiores, y se pueden colorear en diversas tonalidades, con la utilización de pigmentos especiales que se agregan a la mezcla final de hormigón que se aplica sobre la superficie.
Hormigón semipulido: otra excelente opción
A diferencia del hormigón pulido, los suelos de hormigón semipulido no son tan brillantes y tienen mayor agarre. Tienen una superficie trabajada, pero no totalmente, para obtener al final una superficie algo rugosa y áspera, necesaria para ciertas áreas de trabajo o donde los suelos pulidos no sean convenientes, como por ejemplo en las orillas de una piscina.
Este tipo de suelos tienen unas serie de ventajas, entre las que vale la pena mencionar su alta resistencia y durabilidad, menor desgaste, son antideslizantes, proveen mayor tracción, tienen muy bajos costes en su instalación y mantenimiento, y son muy versátiles, ya que se adaptan a cualquier ambiente y estilo de decoración.
El hormigón semipulido es muy utilizado en todo tipo de infraestructuras, por lo económico que es, por sus altas prestaciones y por el buen aspecto que aporta. Es una excelente alternativa que siempre se debe considerar en el desarrollo de cualquier proyecto de reforma o construcción.
La mejor solución para pavimentos industriales
Los pavimentos industriales requieren materiales altamente resistentes, que aguanten el uso y abuso normales que se presentan en las fábricas y establecimientos de ese estilo. En ellos también se usan mezclas de hormigón combinados con otros materiales y aditivos especiales, que los ayudan a tener la resistencia que necesitan.
El pavimento industrial debe soportar pesos extremos, como el paso de camiones y maquinaria pesada, y no fracturarse con ellos. Están compuestos con diversos ingredientes y materiales que pueden variar de acuerdo al uso que se les quiera dar.
Con este tipo de pavimentos se pueden obtener diversas ventajas, entre ellas, que soportan grandes volúmenes de carga, son adaptables, más limpios, la relación coste-beneficios es bastante ventajosa y evitan la propagación del fuego por sus propiedades ignífugas.
Suelos fratasados, otra muy buena alternativa
El hormigón fratasado es muy similar al hormigón pulido, pero sin su brillo, además cambia en algunos aspectos importantes relacionados con la técnica utilizada para su constitución. El fratasado de hormigón requiere una máquina especial llamada fratasadora mecánica, que compacta el material y lo hace aún más resistente.
Este suelo tiene la particular característica de tener una superficie muy firme, uniforme y sólida, que la hace especial para aplicarse en pavimentos industriales y en exteriores, aunque últimamente también se está utilizando en terrazas, garajes y entradas residenciales.
Entre las ventajas de estos suelos, destacan su alta dureza y resistencia, son muy económicos, tienen una superficie antideslizante, pueden utilizarse como base para la instalación de mármol, ladrillos, piedra o cerámica, y son muy versátiles para colocarse en cualquier tipo de ambiente o espacio.