Si una pareja no se queda embarazada tras un año de relaciones sexuales sin protección, es necesario un tratamiento de fertilidad para tener un bebé. Hay distintas opciones. ¿Conoces qué es la reproducción asistida de baja y alta complejidad? Vamos a ver una y otra.
¿Qué es la inseminación artificial? Existe varios métodos de inseminación artificial, que pueden dividirse en dos grupos, que serían técnicas de reproducción asistida de baja complejidad y alta complejidad brindados por una Clínica de Fertilidad de confianza.
Técnicas de baja complejidad
Coito oportuno, espermaticina, inseminación artificial, congelación de esperma, etc.
Técnicas de alta complejidad
Inyección intracitoplasmática de esperma. La fecundación in Vitro consta de 3 fases, vitrificación y diagnóstico genético preimplantacional, etc.
Además, cada una de estas técnicas consta de protocolos y métodos que pueden variar en complejidad.
Las diferentes secciones de este artículo se resumen en el siguiente texto.
Elegir la técnica adecuada
Tanto para el hombre como la mujer es importante evaluar la suma del potencial reproductivo.
Además, pueden ser necesarias varias técnicas combinadas para tratar la infertilidad. Por ejemplo, la fecundación in vitro con diagnóstico preimplantacional y/o la vitrificación de embriones.
Técnicas un poco más complicadas
En la clínica de reproducción asistida se entienden como tratamientos de fertilidad de baja complejidad aquellos que no implican riesgos ni graves inconvenientes para el paciente.
También se consideran técnicas de baja complejidad aquellas que no entrañan graves dificultades técnicas para los profesionales o el personal de laboratorio.
Al cabo de unas dos semanas, el paciente con infertilidad se someterá a un análisis de sangre para determinar si el proceso se ha completado con éxito.
Preservación de la fertilidad
Este es un método en el cual se congelan óvulos y/o esperma. Así, las células podrán guardarse de manera indefinida hasta el momento de procrearse.
La preservación de la fertilidad es un método indicado para pacientes con cáncer, para mujeres que quieren retrasar la maternidad o que padecen endometriosis.
Congelación del esperma
Este método, que proporciona muchas ventajas, es rápido y fácil. Por ejemplo, puede ayudar a preservar la fertilidad en pacientes con cáncer que tienen que someterse a quimioterapia.
La criopreservación de los espermatozoides se realiza, entre otros métodos, por congelación lenta. Para ello, la muestra de esperma debe mezclarse con crioprotectores para evitar que los espermatozoides se dañen.
Vitrificación de ovocitos
La preservación de la fertilidad en la mujer se consigue mediante la vitrificación de ovocitos, es decir, la congelación ultrarrápida de los ovocitos desde 15ºC hasta -196ºC. De este modo, los óvulos se conservan sin cambios físicos y funcionales durante un periodo de tiempo indefinido. La tasa de supervivencia de los ovocitos aumenta y es posible posponer la maternidad con un alto porcentaje de éxito.
En este método, se inyecta a la mujer hormonas bajo control para que maduren varios óvulos. Los óvulos se recogen, se vitrifican y se almacenan en un frasco.
Como confirman nuestros especialistas, la edad es un factor muy importante para mantener la fertilidad.
La mejor edad para la congelación de óvulos es la más temprana. Por supuesto, las mujeres deben ser mayores de 18 años y cuanto más jóvenes mejor.
Podemos fijar la edad óptima para la congelación de óvulos en los 20-30 años.
Ahora ya conoces qué es la reproducción asistida y de baja y alta complejidad y cuáles son tus alternativas.