Estas costumbres se pueden volver un peligro si no nos cuidamos. Durante los meses de otoño e invierno principalmente, escondemos nuestra piel llegando incluso a cubrir más del 90% de ella. Cuando de nuevo vuelve a estar expuesta al sol corremos el peligro de desarrollar ciertas dificultades que pueden ser peligrosas para nuestra salud e incluso, antiestéticas como lo puede ser quemarse al sol. Y es que, cada vez se da más prioridad al físico. Cada vez se escucha más «operación bikini» de cara al buen tiempo. Mantener una dieta saludable para mejorar el físico, así como la parte psicológica es necesaria, junto al ejercicio para llegar bien al periodo playero. Aunque, con esta preocupación tendemos a olvidar algo muy importante: cuidar nuestra piel. Es una de las grandes descuidadas cuando llega la época de sol y si decidimos cuidar cosas tan básicas como nuestra dieta o nuestro cuerpo, ¿por qué no cuidar también nuestra piel? A continuación, te mostramos algunos consejos principales que debemos poner en práctica con la llegada del buen tiempo.
1º Protector solar
Suena a tópico muy típico, pero no solemos hacerle mucho caso. Incluso debajo del maquillaje debemos utilizarlo para crear una película protectora en nuestro rostro. Tanto hombres como mujeres deben usar protector sola incluso si no vamos a estar tomando el sol. El simple hecho de caminar por la calle durante las horas de más sol es un hecho de suficiente fuerza para usar protector solar y así evitar posibles manchas, enfermedades de la piel e incluso esas odiosas arrugas. Tampoco olvides proteger tu piel si vas a realizar deporte al aire libre.
2º Hidrata tu piel a diario
Hay que prevenir la deshidratación de la piel. En verano es necesario hidratarla más de lo normal puesto que tendemos a perder también más agua a través del sudor. Beber agua, darse duchas frecuentes y usar una buena crema hidratante tanto de cuerpo como de rostro puede ser suficiente. Las leches hidratantes después de la ducha, especialmente si hemos tomado el sol, harán lucir nuestra piel mucho más suave y brillante.
3º Limpieza de rostro y exfoliación
Durante la primavera y el verano es más importante que nunca limpiar bien nuestro rostro ya que los poros se dilatan más y entra más suciedad en ellos. Lo recomendable es hacerlo dos veces al día, pero es importante que no te olvides de hacerlo una vez al día. Tendemos a pensar que la limpieza del rostro se reduce únicamente a si hemos utilizado maquillaje y, lo cierto es que, del propio ambiente la piel del rostro también se ensucia. A su vez, la exfoliación es también muy importante para eliminar células muertas y permitir que esta se regenere.
4º Evita el sol en horas peligrosas
Evitar la exposición al sol de nuestra piel durante las horas de mayor verticalidad del sol (entre las 11 y las 16 horas) es primordial para que nuestra piel sufra el menor daño posible. Si esta exposición no es posible, se recomienda protegerte al máximo: usar protección solar alta, gafas de sol, gorros e incluso sombrillas si te encuentras en la playa.
5º Protege tus labios
Puede que sean los grandes olvidados de nuestro rostro. Protegemos los ojos con las gafas y el resto de la cara con cremas protectoras, pero siempre nos olvidamos de los labios. Forman parte de nuestra piel y por ello hay que protegerlos puesto que, además, son una zona muy sensible. Existen productos específicos para ellos y muy cómodos de utilizar, incluso con sabores agradables como cacaos con protección.
En definitiva, seguir una rutina de limpieza, hidratación y protección es muy importante durante todo el año, pero más necesario todavía con la llegada de las buenas temperaturas a nuestro país.