Estados Unidos y los países de la Unión Europea dieron pasos importantes en las relaciones con el país sudamericano Venezuela, por lo que anunciaron el relajamiento de sanciones, pese a que la situación política del país sigue siendo la misma.
Recordemos que, en el año 2014, el presidente de este momento de Estados Unidos, Barack Obama emitió una orden declarando que la nación de Venezuela era una amenaza inusual y extraordinaria para la seguridad estadounidense.
A partir de ese momento, Venezuela pasó a convertirse en un país poco confiable para los banqueros y los inversionistas del mundo, y en el año 2017 con Donald Trump al poder llegaron duras sanciones.
Por esta razón el presidente venezolano anunció que había un bloqueo silencioso en contra del país, cuyo plan era derrocarlo, y este proceso vino a coincidir con la caída de los precios del petróleo en el mundo, haciendo que los ingresos del país se desplomaran a más del 95%.
Muchas sanciones en contra de Venezuela
Entre los años 2017 y 2022 se aplicaron más de 500 sanciones en contra del gobierno venezolano, en la que se vieron aludidos muchos funcionarios, empresarios e incluso empresas del estado. Incluso, el petróleo y la exportación de oro fueron objeto de dichas medidas
Por lo que toda compañía que utilice el sistema financiero estadounidense y realice sin licencia alguna transacción al gobierno de Nicolás Maduro corre el riesgo de ser sancionada por el gobierno norteamericano.
En estas se incluye al sector energético, que es la principal fuente de ingresos del país, la compra de medicamentos, alimentos, insumos médicos, autopartes y hasta las vacunas en contra del Covid-19.
Washington en los últimos 5 años se había negado a negociar con las autoridades de Venezuela, hasta que no se diera un cambio en el régimen.
La crisis de Rusia contra Ucrania cambio todo
Desde el mes de abril algo comenzó a cambiar en Estados Unidos, puesto que comenzaron un acercamiento con Venezuela, todo ello motivado por la guerra entre Rusia y Ucrania, ya que a consecuencia de ella se ha reducido la oferta de petróleo a nivel global y esto ha impactado directamente en el precio.
Por esta razón, ahora EEUU busca resarcir la situación, promoviendo la reactivación de la producción de petróleo venezolano.
Desde marzo, el precio del crudo ha comenzado a subir y sobrepasar incluso los 110 dólares por barril, y se mantienen las previsiones alcistas, aunque la escasez de oferta y el temor a una recesión en Estados Unidos ha hecho disminuir el precio.
Washington reaccionó ante la guerra de Rusia y Ucrania imponiendo sanciones a Moscú en conjunto con sus aliados europeos, y por ello es que ahora el crudo venezolano es de intereses para el gobierno americano y para la Unión Europea. Pues ellos buscan que el petróleo de Venezuela cubra ahora la parte de la demanda de petróleo que deja Rusia a causa de la guerra.
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